Renca, madre de ciudades, cumple su aniversario N° 271
La histórica localidad, enclavada a orillas del río Conlara en el departamento Chacabuco, celebra un nuevo aniversario de su fundación el sábado 14. Se desarrollarán actividades para homenajear los orígenes y la historia del pueblo.
Renca es considerada la ‘madre de ciudades’ o la cuna de gobernadores porque allí nacieron cinco mandatarios provinciales. También es concebida como la tierra de valientes granaderos, ya que hubo soldados de San Martín que entregaron sus vidas por la libertad de América Latina. Es uno de los pueblos más antiguos de San Luis, su nombre significa en lengua mapuche ‘hierba andina’.
Entre sus más preciados tesoros, se encuentra el ‘Santuario del Milagroso Señor de Renca’, que cada 3 de mayo reúne a miles de fieles de toda la provincia y del país. Para reivindicar este nuevo aniversario fundacional, se realizará una misa de acción de gracias a las 11:00, en el templo que resguarda la imagen del milagroso Señor de Renca, y posteriormente una procesión. Desde las 14:00, trasladarán los festejos a la plaza ‘Granaderos Puntanos’, donde se llevará a cabo una feria de artesanos, un concurso de canto y una presentación de números artísticos.
Renca se levanta en el corazón de las Serranías Puntanas, en el Valle de Concarán, que declina suavemente hacia el oeste. Año tras año, miles de personas acuden devotamente a la festividad del Milagroso Señor de Renca. Esta figura religiosa se encuentra resguarda en una de las capillas más antiguas de San Luis, que fue levantada en el año 1732.
El 17 de mayo, aniversario del natalicio del coronel Juan Pascual Pringles, se recuerda también a Juanario Luna, José Gregorio y Basilio Bustos, los granaderos nativos de Renca que murieron en la batalla de San Lorenzo contra los españoles en 1813.
Además de su historia, Renca cuenta con una exquisita gastronomía regional, productores tradicionales y costumbres, ríos, valles y una naturaleza que, en unión con la idiosincrasia de su gente, enamoran.
La Leyenda
Cuenta la leyenda que un indio ciego hachaba un espinillo en un bosque cercano a Renca (próximo a Limache, Chile), cuando sintió su rostro salpicado por la savia del árbol. Repentinamente, recuperó la vista y arrojó el hacha para rastrear lo que le había causado aquella sensación rara. En la búsqueda, tropezó con un pequeño Cristo en el hueco carcomido del árbol. La noticia de la milagrosa aparición cundió rápidamente en todo Chile, y convocó a mucha gente para dar fe del prodigio. Los más piadosos resolvieron darlo a conocer en Cuyo y en Córdoba, y se pusieron en marcha a través de la Cordillera con el Cristo cargado sobre una mansa mula. En cada población a la que llegaba, se lo colocaba en la Iglesia regional y daba origen a grandes ceremonias religiosas, al final de las cuales el indio hacía una colecta de dinero para erigirle un santuario. Al atravesar el río Conlara, camino a la bella ciudad de Córdoba, la mula que cargaba la Sagrada Imagen se echó y no hubo esfuerzo físico que la hiciera levantar. Los creyentes interpretaron que allí quería quedarse el Cristo y en 1932 trabajaron para levantarle una capilla. Ese lugar tomó el nombre de ‘El Señor de Renca’.
En uno de sus terribles malones, los indios llegaron hasta esa villa y después de saquearla, buscaron con afán ese Señor del que tanto se hablaba. Al dar con él, lo sacaron a la plaza y lo lancearon arrojando sus pedazos en la tierra.
En cuanto los invasores se retiraron, los vecinos recogieron los restos dispersos del amado Cristo y lo reconstruyeron a la perfección, para conservarlo hasta el presente como una reliquia sagrada e histórica. Durante la invasión de 1834, encabezada por el cacique Yanquetruz, los indios penetraron en Renca, Santa Bárbara y bajaron a La Carolina, atraídos por la fama de las minas y su comercio. Los vecinos pusieron a salvo la imagen llevándola a Las Lagunas y una vez pasado el peligro, el Señor de Renca volvió a su capilla.
Casa Histórica Provincial ‘José Santos Ortiz’
En una de las esquinas que forma la plaza ‘Granaderos Puntanos’, se encuentra la casa que rinde homenaje al primer gobernador de Renca, Don José Santos Ortiz, quien nació en 1784.
En este edificio, funcionó la primera escuela de Renca: Escuela Superior N°73 ‘Los tres granaderos de Renca’, la cual fue inaugurada el 25 de mayo de 1874 durante la presidencia de Domingo Faustino Sarmiento y la gobernación del Renqueño Lindor Quiroga.
El primer director del establecimiento educativo fue Don Saturnino González Camarero. Durante la gobernación de este prócer homenajeado, se establecieron las bases para organizar la provincia en lo administrativo, judicial y político. Santos Ortiz encuentra su muerte al regresar de Santiago del Estero, encomendado de una misión pacificadora entre esta provincia y Tucumán. En el paraje Barranca Yaco fueron emboscados y asesinados, lugar donde también murió Facundo Quiroga junto con toda su comitiva.
Este edificio, además de sorprender por su arquitectura (con gruesas paredes y un techo que conserva tirantes de quebracho cortados con hacha), también es el Auditorio de la localidad, donde se realizan importantes conferencias culturales, históricas y tecnológicas. En su amplio jardín, se encuentra la escultura de un granadero uniformado, como los que acompañaron al General San Martín en su primer ejército, junto a un gran pino, que fue retoño del que fue testigo de la Batalla de San Lorenzo.
Dentro de la casa, se recuerda a Lindor Quiroga, Santos Ortiz, Toribio, Eriberto y Gerónimo Mendoza mediante una exposición de objetos perteneciente a estos próceres.
Dique San Felipe
El espejo de agua, que se ubica a 138 kilómetros de la capital sanluiseña en el departamento San Martín, es uno de los favoritos de los pescadores. Se asienta en la cuenca del río Conlara. Posee una cuenca hidrológica de aporte de 1.130 kilómetros cuadrados y posee una capacidad de riego de 13.000 hectáreas.
La presa es una de las más representativas de la provincia, con una superficie de 1.282 hectáreas y una capacidad de embalse de 81 hectómetro cúbico. El uso principal que se le otorga es el abastecimiento de agua para la población, el riego, la ganadería y la generación de energía hidroeléctrica además del uso recreativo con la práctica de actividades náuticas, turísticas y deportivas.
Su pintoresco marco natural potencia el gran desarrollo turístico de la zona, con una destacada oferta de clubes, campings y servicios gastronómicos.
Plaza Granaderos de Renca
Es el lugar de nacimientos de los tres granaderos sanluiseños. En el año 1991, fueron trasladados a su morada definitiva: el ‘Monumento al Pueblo Puntano de la Independencia’ en el campamento histórico de Las Chacras. En el Año 2005, la plaza central de la ciudad pasó a llamarse ‘Granaderos Puntanos de Renca’, a modo de homenaje. Cuenta con un diseño muy moderno que combina vegetación autóctona, veredas laterales y diagonales realizadas en distintos tipos de granito. También dispone de bancos de madera artesanales, que se encuentran tallados con los nombres de próceres puntanos.
Santuario Cristo De Renca
La capilla fue levantada en 1732 y es una de las más antiguas de la provincia. Los padres jesuitas que viajaron de Chile trajeron consigo algunos fragmentos de las sagradas astillas de la venerada cruz e imagen de Cristo, la cual fue encontrada labrada en un árbol por un indio en el bosque chileno. Esto daría el origen al nombre de la localidad ‘Renca’, que proviene de una especie vegetal.
En abril de 1947, el poeta Polo Godoy Rojo publicó un artículo en el diario ‘El Heraldo de San Luis’, en el cual señala que la capilla antigua, modestísima construcción de adobe, se hallaba deteriorada a un nivel que volvía necesario derrumbarla a fin de evitar males mayores. El Señor de Renca quedaría provisoriamente depositado en una pieza cedida por el Sr. Bernardo Domínguez. En 1764, el Obispo Alday Aspee elevó su categoría a Parroquia y su primer párroco fue Juan Francisco Regis Becerra, quien ejerció su apostolado en ese lugar durante casi 50 años.
En el costado este de la actual parroquia, existe un monolito que exhibe en su placa que allí existió la primera capilla antedicha. El edificio del templo es una nave rectangular, modulada con relieves de columnas con capitel y arcos rebajados, que están adecuados al ángulo del cielorraso de techo a dos aguas. La fachada repite los relieves de columnas, donde cuatro coinciden con el frontispicio triangular y dos con el borde de la edificación. El paño que ubicado al conjunto central coincide con el de los campanarios laterales. Estos están compuestos de prismas rectangulares, calados con abertura de arcos de medio punto en todas sus caras y remate piramidal.
La fachada presenta una única puerta con arco, que es el acceso principal. La imagen del Cristo se encuentra expuesta a la derecha del altar, en un baldaquín formado por columnas de fuste en mármol ónix y capiteles dorados, que sostienen una cúpula de base octogonal.
Balneario Municipal
Sobre las costas del río Conlara, se encuentra el Balneario Municipal: lugar en el que coincide la concurrencia de vecinos y turistas para desarrollar actividades recreativas, durante la temporada alta y en otras estaciones del año.
Cuenta con servicio de proveeduría y sanitarios, además de una hermosa pileta emplazada en un paraíso natural que, con sus panoramas de altura y cursos de agua, encarna uno de los puntos turísticos más atractivos del Valle del Conlara.