San Luis apuesta a la ‘Técnica del Insecto Estéril’ para combatir la mosca de los frutos
La Provincia se suma a una estrategia ambientalmente segura que permite reducir el uso de agroquímicos y fortalecer el control de plagas en la temporada de mayor actividad de la plaga.
Dentro del ‘Plan de Lucha para Erradicar la Mosca de los Frutos’, la técnica de implantar moscas estériles, aplicada en la época próxima al verano cuando las capturas de mosca de los frutos alcanzan su punto máximo, se basa en la liberación de machos estériles, adquiridos del Iscamen (Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza), que al aparearse con hembras de su especie interrumpen el ciclo reproductivo sin generar nuevas generaciones de moscas.
Esta tecnología, además de ser amigable con el ambiente y carecer de impacto negativo en la biodiversidad local, es una alternativa efectiva frente a los métodos tradicionales de control de esta plaga que, en comparación, requieren de un uso intensivo de agroquímicos con efectos colaterales en el suelo, el agua y la fauna. En lugar de eso, la TIE permite un control de natalidad que actúa de forma precisa y natural sobre la población de moscas, sin dejar residuos contaminantes.
El personal perteneciente al ‘Plan de Lucha para Erradicar la Mosca de los Frutos’ ha sido capacitado en Mendoza para garantizar el manejo adecuado de esta técnica. Con la liberación de los machos estériles en las próximas semanas, se espera aprovechar el ciclo estacional de la mosca, cuando su actividad reproductiva es mayor, para lograr el máximo impacto y proteger cultivos frutales vitales para la economía de la región.
Este esfuerzo se enmarca en la nueva etapa de cooperación entre las provincias de Cuyo, reflejada a través de la ‘Articulación Institucional’ de trabajos entre el ministerio de Desarrollo Productivo de San Luis y el ministerio de Producción de Mendoza. La implementación de la ‘Técnica del Insecto Estéril’ no solo representa un avance en el control de plagas de manera sostenible, sino también un ejemplo del compromiso de los gobiernos cuyanos por fortalecer el desarrollo productivo y ambiental de la región, uniendo recursos y conocimientos para proteger cultivos estratégicos y generar un impacto positivo en la economía local.